Tras varios dimes y diretes acerca de la hora de
quedada para partir rumbo al pueblo de los faraones (Curro Romero y Sergio
Ramos), entre aquellos que preferíamos quedar un poco más tarde para aprovechar
más la cama y llegar a la carrera con el tiempo justo y los que les gusta
quedar más temprano para llegar con prontitud al lugar de salida, al final
establecimos las 8:15 como horario de partida.
Y vaya tela como son las cosas, pues a la hora
establecida sólo uno de nosotros, precisamente el principal defensor de quedar
algo más tarde, Dani mama, se encontraba en el punto establecido, el lugar en
que confluyen las calles Avenida de Andalucía y Carlos Méndez de nuestra
localidad, o lo que es lo mismo y para que todos nos entendamos mejor, la
esquina de Tena. Un par de minutos más tarde llega Juanjo. A las 8:20, tal como
previamente había avisado por whatsapp, debido a que se había quedado dormido,
llegó Carlos Carrión. A las 8:25 (con sus 10 minutos de retraso de rigor)
Maldini, y tres minutos después, Zurdo, de copiloto de Paco, que siendo el
principal valedor de quedar antes, al final fue el último en llegar, si bien
cabe decir en su favor que no fue por interés propio, sino por la
responsabilidad que tiene el cuidar a alguien que en unos años seguramente
estará también corriendo como parte de este club, el pequeñín Álvaro, a lo que
tenemos que unirle que al montarse en el coche se llevó el fiasco de que la
batería se la había ido, con lo que tuvo que volver a su casa y cambiar de
coche.
Con todo lo acontecido, al final la hora de partida
fue la que se había fijado en un principio, las 8:30, con tres miembros de
nuestro club en un coche (Paco V., Zurdo y Maldini), y dos miembros y un
agregado en el otro (Carlos C., Dani mama y Juanjo), llevando cada coche las
típicas conversaciones de carreras, acerca de la marca que piensa hacer cada
uno, pruebas atléticas anteriores y futuras, competiciones en las que
participan otros miembros de nuestro club, etc., y todo ello acompañado por
supuesto de lo que surge siempre que nos reunimos unos cuantos, mucha guasa,
muchas bromas, muchas exageraciones y por supuesto, muchas mentiras. Ah, y lo
más importante del camino… Oh Donna mía venecciana (tum tum tum tum), mas que
la bianca di mio cuore (tum tum tum tum), in mia orden de mia razza (tum tum
tum tum), oh mia gondola finale (tum tum tum tum), abre tu anima cantare (tum
tum tum tum), y mía sérena comparsa…
Ya en Camas, nuestro cicerone particular, ese
estudioso que conoce todos los caminos y lugares a los que nos arrimamos para
liberar un poco de estrés, nervios, energía y grasas, el señor Don Jesús David,
nos iba indicando como llegar al lugar de salida, algo que hace con muy buen
acierto, eso sí, con un pequeño percance, al encontrarnos una calle cortada por
una valla, que estoy seguro que la pusieron al vernos venir para que no pudiese
clavarla a la primera. O tal vez, nos llevase por allí porque quería que
viésemos un coche con dos tíos y una tía cubateando todavía, con los típicos
comentarios de “Hay que ver como está la juventud, están tiraditos al cristal,
a las 9:00 y todavía en la calle bebiendo”. ¡Señores!, que no hace mucho que
esas eran las horas de recogida de muchos de nosotros, y que todavía cuando se
escantilla alguna marcha por ese estilo cae.
Con todo esto vivido ya, a las 9:05 llegamos al
Pabellón Deportivo “Pepe Flores”, aparcando en una explanada que hay justo al
lado, nos bajamos de los coches, y caminito de la salida para recoger los
dorsales.
Ya aquí se empieza a vislumbrar la pésima
organización de la carrera, pues para que cada corredor se hiciese con su
número, había una cola que parecía que íbamos a recoger billetes de 500€. Pero
lo peor estaba por llegar, pues cuatro de nosotros los recogemos a nombre de
C.A. Vasos Largos, uno a nombre de C.A. Viso, y en cambio, el pobre Carlos
Carrión se encuentra la desagradable noticia de que dicen en la organización no
consta que esté inscrito, y que por lo tanto no dispone de dorsal, con el
consecuente mosqueo que ello conlleva, aunque tras una ardua negociación y la
intervención de un miembro de la mafia rusa, de la que comentaban algunos de
los nuestros: “Como se quite el gorro y diga que le den el dorsal, son capaces
de ponerle hasta dinero encima”, que para los que no estuviesen en la carrera,
decir que fue Diego Vergara quien acudió a ver la prueba, hacer de nuestro Puti
Cojonato particular y solucionar el problema. En este tema de los dorsales es
importante reseñar que antes de recogerlos, como buenos ciudadanos, hicimos
entrega de 1kg de alimentos no perecederos para las familias necesitadas de
Camas.
Por fin todos con dorsales, a los
coches y a ponernos la vestimenta de quemar asfalto, ropa veraniega, pues a
pesar de hacer 5ºC, el que más tapado fue de los seis durante la carrera, lo
hizo con mangas cortas y calzonas (si bien nuestro Franxi allá por la tierra de
esos tíos que tan mal me caen porque usan una mierda de dialecto pensando que
tienen un idioma propio, ha hecho lo mismo con -2ºC).
Ya calientes (de calentar, de lo
otro siempre) y dispuestos, algo más tarde todavía de lo marcado, en concreto a
las 10:28, “1, 2 y 3, comienza la carrera”, vislumbrándose desde un principio
lo que cada uno tenía en mente, es decir, un grupo de 4 por delante y otro de 2
por detrás (no es necesario decir nombres, se sabe a la perfección).
Centrándome en el recorrido, y
atendiendo a los comentarios de personas que han participado en ediciones
anteriores, decir que el único acierto de la organización se centró en el
cambio de itinerario, pues los 4 primeros kilómetros transcurrían por calles de
la localidad, del 4 al 7 se metía por un camino paralelo al río Guadalquivir,
por el que da gusto correr (eso sí, justo en la entrada había una zona
conflictiva, con un clan de gitanos, con muy mala pinta en sus chabolas y una
peste a heces horrorosa), del 8 al 14 volvía a hacer un recorrido por el
pueblo, pasando dos veces, ida y vuelta por un puente, ¡qué puente más largo!,
de 1 kilómetro, para entonces volver a hacer los mismos 3 kilómetros por el
margen del río, y ya de aquí a la meta, otra vez a callejear.
Eso sí, durante la carrera,
vuelve a aparecer otro error grave de la organización, como es que en los
avituallamientos, en los kilómetros 5,5, 10 y 15,5, sólo había agua, nada de
alimento sólido que sienta muy bien y hacen en muchas pruebas de esta longitud,
como es un trozo de naranja. Pero lo más grave no es esto, sino que el agua, te
la daban en vasos, y uno puede decir: “Vale, aplasto el vaso, dejo un cañito y
por aquí me la bebo, al igual que se hace en muchos triatlones”, pero el
problema es que encima los vasos eran de plástico, con lo cual esta opción
tampoco vale, y no está la cosa como para pararte a beber y luego tener que
volver a arrancar.
- Maldini: objetivo marcado 1:30:00. Resultado oficial 1:27:12, a 4:07 min/km.
- Paco Vergara: objetivo marcado 1:30:00. Resultado oficial 1:28:11, a 4:10 min/km.
- Zurdo: objetivo marcado llegar lo mejor posible, aunque e da a mí que la mente rondaba 1:35:00. Resultado oficial 1:32:48, a 4:23 min/km.
- Juanjo (no es de los nuestros pero viene con nosotros): objetivo marcado 1:35:00 (aunque en un principio hablaba de 1:30:00). Resultado oficial 1:32:55, a 4:24 min/km.
- Carlos Carrión: objetivo marcado intentar superar su mejor registro en una media maratón, establecido por encima de 1:42:00. Resultado oficial 1:39:38, a 4:43 min/km.
- Dani mama: objetivo marcado el mismo de siempre, llegar lo más dignamente posible, aunque si podía ser, por debajo de 4:45 min/km. Resultado oficial 1:39:47, a 4:43 min/km.
Creo que aquí queda claro que es
una carrera que a todos nos ha sentado muy bien, pues a pesar de la pésima
organización, considero que es una auténtica vergüenza el cobrarte 8€ para equivocarse en la entrega de dorsales, en la
hora de salida, en los avituallamientos y por supuesto en la bolsa del
corredor, con sólo una camiseta técnica, una botella pequeña de agua, una fruta
y un bocadillito (y encima la mía venía sin bocadillo), dados los buenos
resultados, si no hay ningún imprevisto, acudiremos a la siguiente edición.
Además, me quedo con otro aspecto
positivo de esta media maratón, algo personal, y es que creo que por fin he
descubierto el motivo de mis males intestinales en las carreras de larga
distancia, pues a pesar de llevar tres carreras sin tener que preocuparme de
ellos, tres carreras en las que no he tomado ningún complemento vitamínico
durante su desarrollo, hoy he cambiado la glucosa por los geles, y el resultado
ha sido el mismo, en el kilómetro 18 la barriga estaba diciendo aquí estoy yo,
por lo que habrá que pensarse el realizar la maratón ingiriendo únicamente agua
y/o aquarius.
Por último, siempre me gusta
hacer un pequeño resumen estadístico de los nuestros, como es, 6 corredores,
126,582 kilómetros recorridos, 9:20:06 de tiempo empleado, lo que hace una
media de 4:25 min/km.
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