Regalando sonrisas por Paradas, otra vez

El pasado domingo nos desplazamos a la localidad de Paradas para disfrutar y hacer disfrutar de su San Silvestre. Como el año pasado nos marcamos el fin de año con la idea de disfrutar corriendo todos juntos y si además regalábamos sonrisas a los lugareños mucho mejor. Quedamos a las 11 en la casa de Diego y fue precisamente a esa hora a la que llegó nuestro compañero, vamos que la noche anterior fue larga, pero no fue el único al que se le enredó la noche anterior pues algo parecido les pasó a Maldini y Franxi.

De nuevo a Paradas, cuando a principio de diciembre nos pusimos a divisar el calendario de citas para hacer nuestra particular carrera solidaria vimos 2, la citada en Paradas y la clásica de Castilblanco, pero un correo del Club de Atletismo Filípides nos empujó a volver a visitarlos. Quizás por la indecisión de cual carrera disputar o por la altura de la temporada donde hay varios atletas de los nuestros parados la participación mermó con respecto al año pasado.

Pero allí estuvo una representación del club compuesta por Diego, Kisco, Franxi, Maldini y servidor (Chendo), con la baja de última hora de Miguel Ángel Cadenas por los mismos motivos que pusieron en duda la comparecencia de su hermano Franxi, de Maldini o de Diego. Sin olvidarnos de la compañía siempre grata de Silvia y Cristina.

A las 12:30h era la salida y antes aprovechamos para colocarnos nuestros disfraces. Y entonces apareció el Kisco alias "el capitán España" (aunque con un toque de Pipi Calzaslargas navideña), Franxi "la virgen" o "el moro albino", Chendo "el payaso amarillo", Diego "el rubio de procavi" y el alma de la fiesta Maldini "la flamenca". Justo antes de la hora empezamos a regalar caramelos entre los más pequeños y aprovechamos para hacernos una foto con el C.A. Viso.



Salida y ya eramos los últimos, el locutor comentaba que habría un seat ibiza de coche-escoba pero era un ibiza algo extraño pues era más bien una monovolumen wolkswagen. Nada más salir ya nos sacaban más de 50 metros y Diego y Franxi ya estaban buscando algún que otro atajo. Pero entre regalar caramelos a los niños, hacernos notar con el silbato o la popularidad despertada por "la flamenca de rojo" (le cantaban sevillanas a su paso) nos fuimos animando y empezamos a disfrutar mucho de la carrera.

Una carrera que consistía en 2 vueltas a un circuito de 3,5 kms, en el que nos paramos más de una vez como cuando Franxi y Diego se pararon a hacer aguas menores y los efectos de la noche anterior no le dejaban incrementar el ritmo para darnos alcance. Al paso por la línea de meta en la primera vuelta escuchamos la sirena que precedía a los primeros clasificados. Así que nos paramos, dejamos pasar el coche de la policia y entramos "como primeros clasificados" con un gran baño de masas, pero había que seguir otra vuelta regalando sonrisas.

Y como ya hemos dicho, la carrera era de dos vueltas y en cada esquina nos esperaban más niños para recibir sus caramelos, Diego casi mata a alguno con su particular lluvia de caramelos. Ya nos quedaban pocos caramelos, casi nada de espuma y mucho confeti, así que aumentamos el ritmo y fuimos dando caza a diferente corredores, también buscamos algún bar que nos ofreciera alguna rubia espumosa pero no se produjo y la conga fue de nuevo nuestra forma de llegada. De nuevo disfrutamos e hicimos disfrutar.